Exceso de inclinación en un SRI. Cómo evitar el efecto catapulta

La seguridad de los niños en el automóvil es una preocupación importante para todos los padres. La elección del sistema de retención infantil adecuado es esencial para garantizar que el niño esté protegido en caso de un accidente. En particular, cuando se trata de recién nacidos, es importante prestar especial atención a la inclinación adecuada del sistema de retención.

La inclinación del asiento es crucial para prevenir el llamado efecto catapulta, que ocurre cuando la cabeza del niño se inclina hacia adelante debido a una colisión frontal. 

El efecto catapulta se refiere a la fuerza que se genera en un accidente cuando un asiento infantil está inclinado excesivamente hacia atrás, y el niño no está sujeto con fuerza. Si el niño no está asegurado correctamente, puede salir disparado del asiento, lo que aumenta el riesgo de lesiones graves o incluso la muerte.

Para evitar este peligro, se recomienda que el sistema de retención infantil a contra marcha para un recién nacido esté instalado con una inclinación de entre 30 y 45 grados. Esta inclinación ayuda a mantener la cabeza del bebé alineada con su cuerpo, evitando que se desplace hacia adelante en caso de una colisión.

Es importante recordar que los sistemas de retención infantil están diseñados para reducir el riesgo de lesiones graves en caso de accidente. Una inclinación excesiva que aparentemente da la sensación de comodidad y confort, puede ser perjudicial.

En resumen, la elección del sistema de retención infantil adecuado y la correcta instalación y ajuste de la inclinación son fundamentales para garantizar la seguridad de los recién nacidos en el automóvil. Los padres deben tomarse el tiempo necesario para investigar y elegir el sistema de retención adecuado, y seguir todas las instrucciones del fabricante y las recomendaciones de los expertos.

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